(El libertinaje - Albert Mera, Arthur Rimbaud y Paul Verlaine)
Oscura y arrugada como un clavel violeta
Se respira, se agachó humildemente entre el musgo
Todavía mojado tras el amor de la dulce escape
Nalgas de blanco al centro de su borde.
Filamentos como lágrimas de leche
He llorado en el viento cruel que repele
A través de pequeños coágulos de margas rojas
Para ir y perder en la cuesta llamada.
Mi sueño a menudo ha besado su apertura;
Mi alma, celoso del coito física,
Le hizo su cervatillo por goteo y su nido de sollozos.
Es el desmayo de oliva, las caricias y la flauta;
El tubo de la cual el celestial praliné
Canaán, la mujer en la pluma de sudor!
Nunca decidí que quería ser, siempre fui lo que quería y lo que se me antojaba. Soy escritora así que más que sexo me gusta más el erotismo y andar deseando. Para lamentarnos he decidido que ya no voy a consumar el sexo, fue bueno mientras duro pero después resulta que acababa sintiendo como si fuese una sexo-servidora (sin ofender a esas mujeres maravillosas) ya que solamente acuden al panal cuando andan buscando miel y eso me parece una falta de cortesía. Particularmente la de un sujeto X el cual me atrajo por su lado artístico (más que nada) pero después de unas cuantas platicas acabe sintiendome más usada que la señorita Laura.
Como les decía, pornografía, amor, sexo y erotismo no es lo mismo. Así que hablar de sexo para mi incluye el erotismo como primer punto. Y me gusta sentirme así deseada y produciendo deseo pero inalcanzable, más que nada para evitar que vuelvan a romper un corazón y me limitaré a mirarlos desde afuera.
Volviendo al tema, sexo, pues creo que ya son bastante grandes como para decirles lo que está bien o lo que está mal así que lo único que les digo es de que hagan las cosas con protección así nos evitamos enfermedades, embarazos entre otras cosas más.
La foto que deseaba poner pero no se pudo está aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario